Le dije que fuera lo más exigente posible porque cuanto más tarde, mejor, pero parece que está yendo bien. Miré a Nissus, que luchaba por sonreir a mi lado, con ojos divertidos. Es curioso cómo no puedes ir a ningún lado consciente de la mirada puesta en él, porque tiene miedo de desobedecer al marqués Kellyden.
Mientras tanto, terminó el primer baile.
Estaba clavada a la pared con Nissus, luego levanté la mirada.
“¿Por qué vienen?”
Porque la marqués Kellyden venía hacia aquí junto con la marquesa y Cassius. Claramente la cima del Oeste, ¿no? Cuando la familia Kellyden se acercó de esta manera, numerosos nobles abrieron el camino apresuradamente.
—Nissus. Seria.
El marqués Kellyden se detuvo frente a mí. De hecho, era la primera vez que se encontraba en esta posición familiar desde que poseí a Seria.
Mientras tanto, Cassius llegó solo dónde se encontraba Lady Mensla. Aún con sólo mirarlo, mi estómago se sentía congestionado y mi cuerpo temblaba un poco, pero estaba mucho mejor que la primera vez.
—¿Por qué no bailan ustedes dos? ¿Van a ser como flores colgadas en la pared uno al lado del otro?
El marqués Kellyden preguntó en tono severo. Fue Nissus quien habló como un niño.
—Seria Kellyden dice que no puede bailar conmigo.
—¿Por qué?
Respondí cortésmente.
—Ya he guardado el primer baile con el caballero de Berg.
Nissus inmediatamente se aferró al Marqués Kellyden.
—Mire, padre. No hay esperanza, ¿puedo ir con otra dama?
—Nissus Kellyden. ¿Ya olvidaste lo que dije?
—No…
El marqués Kellyden fue muy estricto con Nissus. Aunque sólo por un tiempo. Poco a poco, los parientes de Kellyden y los nobles influyentes de Occidente empezaron a acudir a hablar con el marqués y la marquesa de Kellyden. Aunque rodeados por un círculo, el marqués Kellyden y la marquesa también miraban este lado de vez en cuando.
Después de que pasarán tres bailes.
—Seria.
Escuchó la voz baja de Cassius. Miré hacia atrás. Cassius se acercaba. Apreté los puños en un sudor frío y, naturalmente, crucé los brazos y pregunté.
—¿Qué?
—¿Deja de ser terca y baila con Nissus? Cuando vuelvas, Nissus en Occidente será ridiculizado. Dirán que no pudo bailar una sola vez mientras estaba con su hermana.
“Eh. ¿Me estás amenazando ahora?”
—Estás muy desesperado por tu hermano.
La expresión de Cassius se endureció de inmediato.
—¿Hay alguna razón por la que debería pensar en la cara* de Nissus?
(N/T: hace referencia a la expresión “Perder la cara” que se utiliza en China, es decir ser humillado o quedar mal delante de otra persona)
—Seria.
—¿Cuándo pensaron en mí de esa manera?
—Nunca me he comportado como un niño como tú.
—Sí, lo hiciste. Fingiste no verme en absoluto, ¿no es así?
Ahora que lo pienso, incluso si me escapé después de ver a la familia de Kellyden en la capital imperial, ¿no podrían venir a buscarme? Ellos no lo hicieron. Ni siquiera me escapé en silencio, al principio estaba realmente confundida y me escapé …
—Entiendo que no quisiste preocuparte por mí porque estabas cansado de mi intimidación. Así que no dijiste nada. ¿Pero quieres que ahora sonría mientras tomo de la mano a Nissus?
—… Cómo dices.
Los ojos azules de Cassius me miraron directamente.
—¿No puedes inclinarte un poco esta vez para disculparte por tu mal comportamiento?
—¿Una disculpa?
—Sí. Entonces te veríamos un poco diferente. ¿No cambiaría mucho si fueras un poco obediente?
Lo siento, pero entendí la estructura de poder aquí. Dijo que debía ser lo suficientemente obediente para el marqués Kellyden. No, en primer lugar, ¿qué sentido tiene poder decirle a alguien que es la Gran Duquesa de Berg que sea obediente?
Eso es arrogante también.
—¿Ser obediente?
Entonces respondí con una sonrisa.
—No quiero.
—… ¡Seria!
Cassius apretó los dientes y dijo en voz baja, así que me estremecí y cerré los ojos. Y por un momento … Mi orgullo estaba muy herido.
“¿Qué?”
¿Qué diablos le hizo Cassius a Seria y por qué ella está tan asustada? Maldita sea, ¿Debería llamar a Abigail aquí y matarlo? De todos modos, es difícil celebrar un funeral dos veces, así que ¿no sería mejor enviarlo de una vez?
Estaba realmente asustado en este momento, hasta el punto en que estos pensamientos inmaduros pasaban por su cabeza. Un miedo vivo grabado en su cuerpo. Mi cuerpo empezó a temblar como cuando vi por primera vez a la familia Kellyden, como cuando Lina habló sobre la madre biológica de Seria.
—…..
Aunque mi cara azul se podía ver correctamente, Cassius no se apartó de mí. De alguna manera me las arreglé para exprimir el veneno único de Seria. Reuní el valor y traté de pisar el pie de Cassius con el talón …
—Casius, ¿qué estás haciendo?
—¿Padre? No.
Hubo un salvador inesperado. Miré al marqués Kellyden, que no sabía cuándo había llegado. Era una expresión un poco desconcertada que ni siquiera Cassius había esperado.
El marqués Kellyden miró atentamente mi expresión y habló.
—Seria no tiene buen cutis.
—Quizás… Creo que es porque Seria lleva mucho tiempo de pie. La cuidaré bien, así que padre puedes ir….
—¡Padre!
De inmediato corté las palabras de Cassius. Luego me acerqué rápidamente al marqués Kellyden y lo agarré del brazo. Por un momento, pude sentir un temblor en el brazo del marqués Kellyden. No me importó. Para ser honesta, mis manos también están temblando en este momento.
—Cassius sigue amenazándome.
Por un momento, la sonrisa ceremonial de Cassius se endureció. El marqués Kellyden preguntó de inmediato.
—¿Amenazándote?
—¿Qué tipo de malentendido Seria …?
—Padre.
Inmediatamente me puse de puntillas y le susurré al marqués Keliden, algo inaudito para Cassius.
—Dijo que sea obediente y que si no bailaba con Nissus, no lo dejaría pasar.
—… ¿Qué?
—¿No es suficiente si solo escucho a mi padre? ¿Por qué Cassius está actuando como si ya se hubiera convertido en el jefe de la familia?
Cuando deliberadamente eligió solo palabras provocativas y las dijo, el marqués Kellyden frunció el ceño inmediatamente como si estuviera disgustado.
—… No intentes separar a tu familia con esas tonterías, Seria.
—Esa es mi opinión, pero la afirmación anterior es cierta, papá.
¿Dónde me veo normal ahora? Obviamente fue justo después de escuchar la amenaza.
“Hay algo bueno en temblar cada vez que ves a Cassius.”
El marqués Kellyden me miró y le dijo a Cassius.
—Cassius Kellyden, si no has visto a tu hermana en mucho tiempo, ¿por qué tienes que ser tan inmaduro?
—¡Padre…!
—Cassius Kellyden.
Los hombros de Cassius temblaron ante el sonido de una voz fría que nunca antes había oído.
—Mis palabras aún no han terminado. Hay muchos ojos viendo ahora.
—….
Cassius inmediatamente inclinó la cabeza en respuesta a la fría respuesta del Marqués Keliden. Fue entonces cuando, la marquesa de Kellyden, que parecía estar observando la situación en silencio desde una distancia bastante cercana, se acercó rápidamente.
—¿Seria? ¿Te escuché mal? Cassius … ¿qué?
— Escuche a mi padre. Marquesa.
Por lo general, el marqués Kellyden y yo seguimos hablando mientras manteníamos este nivel de rigidez. Pero, inesperadamente, la marquesa de Kellyden, que me escuchó, me dio una expresión de sorpresa.
—Oh Dios mío, Seria. ¿Por qué hablas con tanta frialdad?
—¿…..?
Incliné la barbilla porque me quedé sin habla y rápidamente entré en pánico.
“¿Está llorando? ¿Ahora? ¿La marquesa de Kellyden?”
Porque la marquesa estaba llorando.
—¿De verdad tienes que decir algo así? Aun así, llegaste al castillo después de tanto tiempo … Es una lastima que no bailé con nadie. Seria …
Sus lágrimas eran poderosas. Es extremadamente raro que una noble de alto rango, de esa posición, llore en un lugar tan público. Y como era raro, no tenía ni que hablar del efecto.
—Es más… Aunque sugerí eso, te negaste y solo avergonzaste al marqués Haneton.
“¿Qué avergoncé al marqués Haneton?”
Había aristócratas que se agitaron particularmente por la palabras de la marquesa de Kellyden. Todos eran rostros nuevos, pero uno de ellos llevaba una capa con el diseño de una familia claramente grabado en él.
Eran vasallos de Haneton.
Por un momento, mi cabeza latió con fuerza. Era demasiado decir que lo había avergonzado, pero es cierto que evité a Kalis. Había mucha gente aquí, y no había forma de que la corriente no hubiera sido captada por la mirada penetrante de algunos nobles. Sabiendo que no importaba mucho, evitó a Kalis, pero la situación sería diferente si la marquesa de Kellyden lo planteara así.
Era solo eso ahora. El ambiente entre las palabras de la marquesa de Kellyden y mis acciones se volvió malo.
Se escuchó una voz ahogada.
—Qué vergüenza.
—¿Está bien deshonrar a todos los nobles de Occidente porque se convirtió en la Gran Duquesa de Berg?
—Es tan arrogante y grosera.
Aún así, ¿no es demasiado tratar de vincularla con la familia Berg? Busqué en la memoria de Seria sin ninguna agitación por el momento. Sin embargo, la respuesta de Seria a esta situación desfavorable sería mirarlos con ojos venenosos. Gritar. Verter el champán que sostenía y romper la copa.
‘No.’
No todo era lo suficientemente malo por ahora. La marquesa Kellyden continuó.
—Seria, a pesar de que rompieron, ¿no es cosa del pasado? No debería ser tan intolerante con el marqués Haneton. Un verdadero noble nunca actuaría así. ¿Sabes lo respetuoso que fue el marqués Haneton contigo?
¿No ser intolerante?
Mi mano que sostenía la copa de champán se enfrió.
Los cálculos de otras personas se han vuelto inconsistentes y la calidad de sus patrones ha cambiado, por lo que podrán ser generosos en el futuro cuando rompa su matrimonio por razones comerciales como esa. No es tan importante que casi pierdo la vida. Ni el comportamiento de su prometido que eligió a Lina antes que a mí.
Pero estaba seguro. Sacar a relucir tal cosa fue claramente algo hecho a propósito.
No tenía ninguna intención de comprar un boleto de simpatía por decir tal cosa en un lugar lleno de gente a la que no le agrado. ¿Cuál es el punto de parecer lamentable ante estos aristócratas mordaces? A la larga, solo volvería a mí como una pérdida.
Miré al marqués Kellyden y miré hacia abajo. No podía pensar en otra manera, aparte de dar un paso atrás hacia la pared ahora.
—Marquesa Kellyden.
En ese momento, la voz que escuché no fue otra que la de Kalis.
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