El consorte del emperador se suicidó.
El emperador del imperio ‘Rupel’, el dragón negro Akelans, fue amado a primera vista por Hasolan, quien le fue leal y devota durante 14 años, pero finalmente fue abandonada miserablemente sin recibir nada a cambio. Lamentando su vida pasada, se ahorcó con la seda que el emperador le había dado, pero al abrir los ojos se encontró 14 años atrás, en el carruaje camino a la cueva del dragón donde lo había conocido por primera vez. No importa lo que hiciera, Hasolan Odair siempre volvía a ‘aquel día’ de hace 14 años. Finalmente, se encontró de nuevo con el hombre que la había abandonado tan cruelmente. Sin embargo, el dragón negro Akelans que despertó no era el mismo hombre que ella conocía.
«Tú eres mi consorte.»
«Si no quieres, no seré emperador.»
Ese emperador, antes excesivamente frío y tranquilo, ahora la miraba con ojos dorados y brillantes, sin intención de dejarla ir.
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