Un grave silencio se instaló entre ellos.
En ese momento, el tiempo se detuvo y todo lo que Aria pudo ver fue a Lloyd y a ella misma.
Era como si fueran las únicas dos personas que quedaban en el mundo.
“Vamos a caer al infierno juntos”.
Sonrió.
Ese día, las nubes barrieron la tierra. Su visión estaba rodeada por la más ligera de las nieblas.
Miró sus ojos grises, pero la neblina nubló su campo de visión.
Le devolvió la mirada, pero sus orbes no mostraban luz. Estaban huecos y vacíos.
Cuando la niebla se dispersó, también lo hizo la ilusión de Aria.
‘Ah’.
Era solo un recuerdo.
Aria podía ver su aliento formando una pequeña nube brumosa en el aire frío.
‘Eso estuvo cerca’.
Casi había hablado.
Shaaawー
Volvió a la realidad.
El tiempo, que ella pensó que se había detenido, comenzó a moverse de nuevo.
“No pareces entender la situación, ¿verdad?”.
Aria estaba serena, ante el rostro serio de Lloyd.
La expresión de Lloyd se oscureció y presionó la hoja más profundamente en su carne.
La sangre resbalaba por su nuca.
“…”.
Fue doloroso, pero Aria no emitió ningún sonido.
Estaba acostumbrada a soportar el dolor y a reprimir sus gemidos.
“Por lo que veo, es cierto lo que dicen. No puedes hablar”.
Gruñó.
‘¿Me estaba probando?’.
Aria lo miró nerviosa.
Dudó de ella desde el principio.
‘Es agudo. ¿Me descubrieron?’.
La lluvia helada se derramó sobre su piel pálida y suave.
Su postura se debilitó bajo el peso de su vestido empapado.
‘Duele…’.
Sus dedos se aflojaron.
Aria dejó caer su paraguas.
Clank.
Shaaaー
Por fin, el rostro de Aria, que estaba oculto por su paraguas, finalmente se reveló.
La expresión fría de Lloyd ahora fue reemplazada por una mirada perpleja.
“… ¿Conejo?”.
Su máscara de conejo lo había tomado por sorpresa.
“Conejo…”.
Murmuró Lloyd.
Arrugó la frente al ver a Aria temblando bajo el torrente de fuertes lluvias.
“Conejo”.
“…”.
“Si vas a responder a mi pregunta revelando tus verdaderas intenciones, solo pronuncia tus palabras y leeré tus labios”.
‘¿Verdaderas intenciones? Si esa fuera mi verdadera intención…’.
Ella había escapado de su jaula solo para encontrarse con él.
Estaba dispuesta a sacrificarse por él.
Aria sería voluntariamente un trampolín si estuviera destinado a ayudar a lograr los objetivos de él, su benefactor.
A ella no le importaría quemarse por completo solo para dejar que él brillará al máximo, como el espléndido sol de la tarde, sino que se sentiría honrada solo por tener una oportunidad.
‘Yo… no puedo decirlo’.
Aria recordó sus momentos con Diana.
Se sentía muy bien cuando le acariciaban la cabeza.
Así que Aria se armó de valor, extendió su mano y le dio unas palmaditas en la cabeza.
“…”.
Lloyd la miró como si estuviera loca.
* * *
“Parece que nunca antes has sostenido un arma”.
Dijo Lloyd, tocando las manos de Aria.
Observó sus dedos delgados, eran blancos y suaves. No tenía callos.
“¿No tienes que aprender al menos un arma a tu edad?”.
‘¿A los diez años?’.
Aria se sorprendió.
“Solo hay huesos en tu cuerpo, ¿dónde están tus músculos?”.
‘¿Por qué los niños de diez años tendrían músculos?’.
Aria inclinó la cabeza.
Lloyd agarró su muñeca y la sostuvo por un rato.
Después de eso, colocó sus dedos en sus propias muñecas y luego frunció el ceño.
“¡Es un milagro que estés viva! Eres muy frágil y tu pulso es débil. ¡Tus huesos son tan frágiles que podrían romperse si los aprieto demasiado fuerte!”.
“…”.
“¿Todos los humanos fuera de nuestro territorio son tan débiles?”.
Lloyd hizo una pausa.
“Eres incluso peor que Madre…”.
Sus palabras se apagaron.
Él la miró como si fuera un animal raro. Uno que nunca había visto antes.
‘Era débil desde el principio… y mi cuerpo solo se debilitó porque fui abusada y me negaban la comida’.
Aria pensó para sí misma.
Sin darse cuenta, se puso la mano en el cuello y tembló de dolor.
Ella respiró hondo mientras el dolor se extendía por su cuerpo.
“…”.
Lloyd sacó un pañuelo de su bolsillo y lo arrojó hacia Aria.
Instintivamente, Aria agarró el pañuelo volador.
“Úsalo y tíralo”.
Aria miró alternativamente entre el pañuelo y la cara de Lloyd.
Luego, presionó ligeramente la herida abierta de su nuca.
Lloyd, que no podía soportar mirar, se deslizó más cerca de ella y se lo arrebató de las manos.
“Déjame hacerlo”.
Él hábilmente atendió a su herida.
La herida no era realmente profunda, pero parecía que la sangre seguía saliendo a borbotones debido a que se diluía con el agua de lluvia.
Detuvo la hemorragia en un instante, le pasó el pañuelo por el cuello y lo ató.
“¿Por qué llevas una máscara?”.
Lloyd golpeó ligeramente su máscara con el dedo.
Aturdida por su repentina acción, Aria se estremeció.
“Tú, conejo”.
La máscara de conejo estaba empapada con agua de lluvia.
‘Me alegro de que el algodón fuera suave, pero ahora se siente incómodo’.
Pensó Aria.
Su apariencia era bastante graciosa y divertida, pero Lloyd mantuvo una cara seria.
“¿Fuiste criada por una rata de alcantarilla?”.
Aria se tambaleó ante sus palabras. No había pensado que estaba bajo sospecha. Sus intuiciones eran bastante agudas.
“Ratas” significaba el mundo criminal. Usó tales términos para disminuir la fatalidad de sus palabras.
“Aquellos que son criados por ratas no pueden hablar o les cortan la lengua. Esto es para que no puedan exponer a sus amos”.
Los subordinados de las Ratas vivían y morían por sus amos, sirviéndoles con lealtad toda su vida. No tenían sentido sin ellos, como marionetas sin vida.
“Viniste aquí como la hija del Conde Cortz, pero tu nombre no figura en el registro familiar. ¿Cómo te verificarás si no te creímos al pie de la letra?”.
Lloyd escudriñó.
Como había dicho, Aria no podía probar su identidad.
‘Además, hay mucho odio entre los Valentine y las Ratas de alcantarilla’.
Pensó Aria con retraso.
A pesar de lo infames que son los Valentine, en particular tenían muchos enemigos.
Por lo tanto, era comprensible por qué desconfiaba tanto de la repentina aparición de Aria.
“Solo hay una forma de saber si alguien estaba asociado con una rata”.
‘¿Existía tal método?’.
Las ratas se habían infiltrado y esparcido por todo el imperio, y debido a eso, el Emperador sufría enormes dolores de cabeza tratando de distinguirlas de sus súbditos de confianza.
“No hay otra forma que matar a los subordinados de la Rata”.
“…”.
“¿Bien?”.
“…”.
Aria no pudo comprender cómo Lloyd había llegado a tal conclusión.
“Como era de esperar, eres uno de ellos”.
Cuando Lloyd estaba a punto de desenvainar su espada de nuevo, rápidamente colocó su mano sobre la de él.
Sus dedos estaban temblando.
Por primera vez en su vida, quería desesperadamente maldecir.
Cerró los ojos.
Después de una breve vacilación, separó los labios.
ーHijo de puta.
Esa fue la primera vez que maldijo.
Aria no lo dijo en voz alta, así que no estaba tan nerviosa como había pensado que estaría.
“… Dímelo directamente a la cara la próxima vez”.
Estuvo a punto de matarla.
“Mmm“.
‘¿Pasó algo?’.
La expresión de Lloyd no era la mejor, pero relajó el agarre del mango de la espada.
“Si no estás trabajando para una Rata, entonces córtate las manos”.
Se quejó.
“Defenderse a uno mismo es una manera de sobrevivir. No hay lugar en la Casa de Valentine para un niño tan débil como tú”.
Replicó Lloyd y quitando la mano de Aria.
Cuando se despidió, Aria se quedó sola en el pasillo, y después de que él desapareció por completo de su vista, ella también se alejó.
De repente, cuando estaba a punto de doblar la esquina, escuchó un montón de susurros.
“¿El Gran Duque se ha ido?”.
La criada siguió parloteando, haciendo circular todos los chismes que había oído entre los otros sirvientes.
Estaban susurrando en voz baja, pero Aria podía escucharlos con bastante claridad.
Las sirenas eran débiles en general, pero sus cinco sentidos eran excepcionalmente agudos.
Los cinco sentidos: vista, oído, olfato, gusto y tacto.
Al igual que cierta raza nació con talentos artísticos, las sirenas eran conocidas por sus agudos sentidos.
Me alegro de que Lloyd no me descubriera.
De hecho, Aria apenas había escapado. Instintivamente reaccionó al sonido de las pisadas de Lloyd y se volvió hacia él.
Afortunadamente, él no parecía haber notado sus sentidos debido a su apariencia débil.
‘La impotente y débil Aria…’.
Esperaba que él siguiera creyendo eso.
“¿Está segura?”.
“Sí, cada vez que se enferma, expulsa a todos los sirvientes”.
“Escuché que quería estar sola”.
“Sí, incluso el Gran Duque y Su Alteza no son una excepción”.
“También escuché que hubo muchas muertes hoy”.
Dijo la criada con un suspiro.
“¡Lo sé! ¡Su Alteza rastreó a los espías que se infiltraron en el Gran Ducado el otro día y los capturó a todos! Además, los encerró dentro de la jaula del jaguar para ponerlos como ejemplo”.
Se estremeció la sirvienta.
“Parece que el padre y el hijo, que fueron expulsados por la Gran Duquesa, estaban descargando su ira en los demás”.
Ella entendió inmediatamente.
La Gran Duquesa había estado luchando entre la vida y la muerte, esta podría ser incluso la última. Si no pudiera estar con ella durante su muerte, en realidad podría volverse loco.
Pero seguía andando por ahí matando gente. Aparentemente, él no era hijo de la diabólica pareja ducal por nada.
‘¿Me dejó vivir porque parezco débil?’.
Aria se sintió afortunada.
No obstante, todavía sentía un dolor punzante en el cuello.
“No era la primera vez que la señora recae, ha superado innumerables obstáculos. Pero esta vez…”.
“Cuidado con tus palabras”.
“Pero tú sabes. Es la primera vez que la señora hace testamento.”
Las criadas se quedaron en silencio. Después de un rato, una de las sirvientas murmuró con voz triste.
“…Sí. Ella desea ser enterrada debajo del cerezo. Estaba deseando que llegara la primavera, pero lo que nos recibió fueron interminables días lluviosos, por lo que debe estar decepcionada”.
“Ella realmente estaba esperando que florecieran los cerezos…”.
“Esta maldita temporada de lluvias. ¿Por qué está arruinando las vistas de primavera?
“Maldita sea. A la mierda este mundo. ¡Solo perece ya!”.
Por temor a los que estaban en la mansión del diablo, naturalmente exageraron, maldiciendo a Dios y orando por la destrucción del mundo.
Después de un tiempo, sus voces se desvanecieron.
‘Flores de cerezo’.
En el momento en que Aria escuchó eso, recordó los cerezos que había visto mientras paseaba por el jardín.
Inmediatamente corrió de regreso allí.
* * *
Afortunadamente, no se había asignado ninguna escolta a Aria.
Además, a nadie le importaba dónde y qué estaba haciendo ahora que la Gran Duquesa estaba al borde de la muerte.
“Y también porque Diana había dicho que estaba bien admirar las flores”.
Ella esperó hasta tarde en la noche.
Era casi el amanecer.
Aria miró hacia el cielo con la cabeza inclinada hacia atrás y se levantó lentamente del cerezo en el que estaba apoyada.
Puso su mano en el cerezo.
Aunque los pétalos se habían caído después de la lluvia, todavía era un árbol muy grande.
Lo suficientemente grande como para ser visto desde el dormitorio de la Gran Duquesa.
‘Canción de la vida’.
Finalmente pudo cantarla de nuevo después de mucho tiempo.
Aria cerró los ojos.
Entonces, una dulce melodía emergió de sus labios.
Traducción: Dashy
Corrección: Sumi
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